Bernie Ecclestone, figura histórica de la Fórmula 1, ha tomado la decisión de vender su exclusiva colección de 69 monoplazas históricos, una de las más impresionantes y completas del automovilismo mundial. Esta colección incluye vehículos que marcaron hitos en la historia de la F1 y que fueron pilotados por leyendas como Michael Schumacher, Niki Lauda, Ayrton Senna y Mike Hawthorn.
La colección, que ha permanecido en su mayoría fuera del ojo público, representa un viaje a través de las décadas doradas de la Fórmula 1. Entre las piezas más emblemáticas destacan el Ferrari 375 F1 con el que Alberto Ascari ganó el Gran Premio de Italia en 1951 y el Vanwall VW10, el monoplaza con el que Sir Stirling Moss obtuvo la primera victoria de un coche británico en el campeonato en 1958.
Ecclestone, quien lideró la Fórmula 1 durante más de cuatro décadas, acumuló esta impresionante colección a lo largo de 50 años. Los monoplazas han sido cuidadosamente preservados y reflejan no solo la evolución tecnológica del deporte, sino también las historias de los pilotos que los llevaron al límite en los circuitos más icónicos del mundo.
El valor estimado de la colección oscila entre 300 y 500 millones de libras esterlinas, convirtiéndola en un tesoro de incalculable valor para los coleccionistas y apasionados del automovilismo. Sin embargo, Ecclestone asegura que la venta no está motivada por razones financieras. El exdirectivo, de 94 años, explicó que su principal preocupación es garantizar que estos vehículos tengan un futuro asegurado y evitar que su esposa, Fabiana, tenga que lidiar con ellos en el futuro.
La gestión de la venta está siendo llevada a cabo por Tom Hartley Jnr, un renombrado concesionario británico especializado en vehículos de lujo e históricos. Según expertos, esta subasta representa una oportunidad única para adquirir piezas irrepetibles que encapsulan la esencia de la Fórmula 1.
Entre los motivos de Ecclestone para tomar esta decisión se encuentran también recientes complicaciones legales y su deseo de simplificar su legado material. Recientemente, enfrentó un caso judicial por fraude y fue multado por activos no declarados en el extranjero, lo que podría haber influido en su decisión de organizar esta venta monumental.
La subasta de esta colección no solo es un evento significativo para el mundo del motor, sino también un reflejo del impacto que Bernie Ecclestone ha tenido en la Fórmula 1. Sus monoplazas, ahora disponibles para el público, son un testimonio vivo de las grandes gestas que marcaron la historia de este deporte.
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