El primer Audi eléctrico que completó el Dakar termina desguazado en un vertedero ilegal en República Checa

En 2022, Audi hizo historia en el Rally Dakar al introducir el Audi RS Q e-tron, el primer vehículo electrificado de la marca en participar en esta exigente competencia. Este innovador modelo, pilotado por Mattias Ekström y Emil Bergkvist, logró una destacada novena posición en su debut, sentando las bases para el triunfo de Audi en 2024 con Carlos Sainz y Lucas Cruz al volante.

A pesar de su relevancia histórica y tecnológica, este pionero del Dakar no encontró su lugar en un museo o en la colección de un entusiasta. Sorprendentemente, en diciembre de 2024, el vehículo fue descubierto desguazado en un vertedero ilegal en la localidad de Jiříkov, República Checa. Más de 210 toneladas de residuos, incluyendo partes del Audi RS Q e-tron, fueron transportadas desde Alemania al antiguo aserradero de Těchanov, situado en la zona protegida del Parque Natural de Sovinecko.

Las autoridades locales expresaron su asombro al encontrar componentes de un vehículo tan emblemático entre los desechos. Audi había contratado a una empresa especializada para deshacerse del coche tras su participación en el Dakar 2022. Sin embargo, en lugar de recibir un tratamiento adecuado, el vehículo terminó en un vertedero clandestino, una situación que ha generado indignación tanto por el destino del coche como por el impacto ambiental de los residuos ilegales.

Este incidente plantea interrogantes sobre las prácticas de eliminación de residuos en la industria automotriz y la responsabilidad en la gestión de vehículos históricos. El Audi RS Q e-tron no solo representaba un avance tecnológico significativo, sino que también era un símbolo del compromiso de la marca con la innovación y la sostenibilidad en el deporte motor. Su desmantelamiento y abandono en condiciones inapropiadas subrayan la necesidad de establecer protocolos más estrictos para preservar y gestionar adecuadamente vehículos que forman parte del patrimonio automovilístico.

El desafortunado destino del primer Audi electrificado en completar el Dakar refleja una falta de reconocimiento y cuidado hacia piezas clave de la historia del automovilismo. Este hecho destaca la importancia de implementar medidas de conservación y gestión responsable para asegurar que vehículos que han marcado hitos en competencias de renombre mundial no terminen en el olvido de una manera tan lamentable.