Marco Bezzecchi dejó todo en la pista de Mugello. El piloto italiano completó una sólida actuación frente a su afición, remontando desde la décima posición en la parrilla hasta cruzar la meta en un meritorio quinto lugar. Aunque el objetivo era claro —luchar por el podio en su carrera de casa—, Bezzecchi se mostró realista y honesto al final de la jornada: “Soñaba con subir al cajón, pero di todo lo que tenía. Hoy, esto era lo máximo”.
Durante las primeras vueltas, el ritmo del piloto de Aprilia fue consistente, aprovechando los huecos que se abrían y ejecutando una estrategia limpia. A mitad de carrera, un momento clave se presentó cuando Franco Morbidelli cumplió una long lap penalty, lo que le permitió a Bezzecchi intentar un adelantamiento sobre Fabio Di Giannantonio. Pero ese movimiento tuvo un costo: al forzar el ritmo, el neumático delantero se degradó rápidamente, dejando sin opciones reales de seguir escalando posiciones.
Bezzecchi reconoció que en las últimas seis o siete vueltas, el grupo delantero era inalcanzable: cada uno de los cuatro primeros rodaba al menos cuatro décimas más rápido por vuelta. En ese contexto, el quinto lugar fue una pequeña victoria personal. “Sentí que iba al límite. Intenté apretar, pero mi rueda delantera estaba completamente destrozada. No había nada más que pudiera hacer sin arriesgarlo todo”, explicó tras bajarse de la moto.
A pesar de no subir al podio, el piloto valoró de forma positiva el avance de Aprilia en términos técnicos. Señaló una mejora notable en el comportamiento del tren delantero, lo cual le dio confianza en las zonas más rápidas del trazado. Sin embargo, admitió que en circuitos como Mugello —donde la estabilidad y la precisión en curvas de alta velocidad son determinantes— la moto aún no está al nivel de las Ducati, especialmente en lo que respecta a la gestión de neumáticos con compuestos nuevos a lo largo de toda la carrera.
El balance del fin de semana para Bezzecchi es optimista. A pesar de que el sueño del podio en casa no se cumplió, dejó Mugello con la sensación de haber dado lo mejor de sí, tanto en lo personal como en el trabajo conjunto con el equipo. El resultado refuerza su confianza y consolida su papel como el piloto Aprilia más destacado del fin de semana.
Con este desempeño, Bezzecchi se perfila como uno de los nombres clave en la segunda mitad del campeonato. Si Aprilia logra afinar los detalles que aún la separan de la perfección, el italiano podría volver a luchar por el podio muy pronto, esta vez sin tener que conformarse con un “casi”. En Mugello, el podio se le escapó por poco, pero dejó claro que está más cerca de lo que parece.
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