19/04/2025

Fabio Quartararo muestra su frustración con Yamaha y exige mejoras urgentes

Fabio Quartararo, campeón mundial de MotoGP en 2021, ha manifestado su descontento con el rendimiento actual de la Yamaha YZR-M1, reflejando una creciente frustración ante la falta de avances significativos en la moto. A pesar de las expectativas generadas durante la pretemporada, los primeros resultados de 2025 han dejado en evidencia que el equipo sigue lejos de los principales contendientes del campeonato.

Las pruebas de pretemporada en Sepang indicaban que Yamaha había realizado mejoras prometedoras, lo que generó optimismo en Quartararo y su equipo. Sin embargo, la realidad ha sido distinta en las primeras carreras. En el Gran Premio de Tailandia, el piloto francés finalizó en la 15ª posición, mientras que en la carrera sprint de Argentina solo logró un décimo puesto, quedando a 12 segundos del ganador. Estos resultados reflejan una brecha considerable con respecto a las escuderías punteras, lo que ha llevado a Quartararo a cuestionar el desarrollo y evolución de la moto.

Uno de los principales problemas que ha señalado es la falta de agarre en las tandas largas. Aunque la Yamaha ofrece un rendimiento aceptable en vueltas individuales, su consistencia en carrera es deficiente, lo que le impide competir al más alto nivel. Este aspecto ha sido una preocupación constante para el piloto, quien ha insistido en que, sin solucionar este problema, será imposible mejorar en otras áreas.



Además, Quartararo ha expresado su preocupación por la falta de puntos fuertes en la M1. A diferencia de otras marcas que tienen ventajas claras en aceleración, velocidad punta o frenada, Yamaha actualmente no sobresale en ninguna de estas áreas. Esto ha generado una sensación de estancamiento dentro del equipo, especialmente porque el piloto francés había renovado su contrato en 2024 con la promesa de un proyecto competitivo.

A pesar de los esfuerzos de Yamaha por introducir mejoras, como la incorporación de nuevos chasis y motores, los resultados en pista siguen sin reflejar un progreso sustancial. Quartararo ha dejado claro que no puede permitirse otra temporada luchando en posiciones secundarias y ha exigido soluciones inmediatas para reducir la brecha con Ducati y otras marcas dominantes.

La temporada 2025 se presenta como un desafío crucial para Quartararo y Yamaha. Si el equipo no encuentra una manera efectiva de mejorar el rendimiento de la moto en las próximas carreras, la posibilidad de que el piloto francés busque nuevas oportunidades para el futuro será cada vez más real. Con el campeonato aún en sus primeras fases, el tiempo para reaccionar es limitado, y Yamaha deberá trabajar a contrarreloj para ofrecerle a Quartararo una máquina que le permita luchar nuevamente por victorias.