Toyota ha decidido relanzar uno de sus modelos más singulares en el mercado norteamericano: el C-HR. Esta vez, regresa completamente renovado y con un enfoque decidido hacia la electrificación. Bajo el nombre C-HR+, la nueva generación de este SUV compacto se convierte en una pieza clave dentro de la estrategia eléctrica de la marca japonesa, no solo por su diseño futurista, sino por las prestaciones que lo colocan en una liga distinta frente a su antecesor.
El nuevo C-HR+ comparte plataforma con los modelos eléctricos bZ4X y bZ3X de Toyota, así como con el Subaru Solterra, lo que garantiza una arquitectura enfocada desde su concepción en el desempeño eléctrico y la eficiencia energética. A nivel estético, el modelo abandona las líneas angulosas de su versión anterior para adoptar un lenguaje de diseño más aerodinámico y fluido, muy en la línea del nuevo Prius. Sobresalen los faros delanteros estilizados con firma luminosa en forma de “C”, una silueta con caída tipo coupé y una propuesta cromática que incluye versiones en doble tono o colores sólidos con detalles contrastantes. Dependiendo de la versión, el modelo puede equipar rines de entre 18 y 20 pulgadas.

En el habitáculo, el C-HR+ da un salto hacia una experiencia digital premium. Equipa una pantalla central de 14 pulgadas compatible con Apple CarPlay y Android Auto, acompañada de un cuadro de instrumentos completamente digital, retrovisor interior con cámara, iluminación ambiental personalizable y doble cargador inalámbrico para smartphones. El confort también está presente con asientos de piel sintética con ajuste eléctrico y calefacción, aire acondicionado automático de doble zona y materiales de acabado con un enfoque ecológico.
En cuanto a la motorización, Toyota ha dotado al C-HR+ con un sistema de tracción total (AWD) conformado por dos motores eléctricos que, en conjunto, ofrecen una potencia de 338 caballos de fuerza. Este tren motriz le permite acelerar de 0 a 96 km/h en apenas cinco segundos, colocándose como uno de los SUV eléctricos más ágiles de su categoría. La batería de 77 kWh promete una autonomía estimada de hasta 467 kilómetros por carga, y es capaz de recargarse del 10 al 80% en solo 30 minutos utilizando carga rápida, lo cual lo hace competitivo frente a rivales como el Hyundai Kona Electric o el Kia EV6.

El precio estimado para el mercado estadounidense ronda los 35,000 dólares, lo que equivale a unos 677,000 pesos mexicanos, un costo que lo posiciona como una opción accesible dentro del creciente segmento de SUV eléctricos compactos. Aunque Toyota no ha confirmado oficialmente su llegada a otros países, un prototipo del C-HR+ fue recientemente avistado circulando en la Ciudad de México, lo cual sugiere que la marca podría estar evaluando su comercialización en el mercado mexicano.
Este regreso del C-HR en versión totalmente eléctrica representa mucho más que una evolución estética: es un claro reflejo del compromiso de Toyota con un futuro más sostenible, sin sacrificar diseño, prestaciones ni conectividad. El C-HR+ se perfila como uno de los modelos más interesantes del portafolio eléctrico de la firma japonesa y podría marcar el inicio de una nueva etapa de electrificación más audaz en América Latina.
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