ZF presenta volante transformable que apunta al futuro de la conducción autónoma

ZF ha revelado un volante innovador que va más allá de las funciones tradicionales: se transforma para adaptarse según el nivel de autonomía del vehículo, marcando un paso importante hacia la era de los autos sin conductor.

Este volante, diseñado para funcionar tanto como volante convencional como dispositivo retráctil, cambia de forma dependiendo del modo de manejo. Cuando el vehículo está en modo autónomo, el volante puede retraerse, dejando más espacio en el habitáculo y modificando la experiencia de manejo. En cambio, si el conductor toma control, recupera su estructura estándar con todos los botones y controles táctiles que se esperan de un volante moderno.

La propuesta de ZF ha sido pensada con miras a los vehículos de conducción autónoma de nivel 4 o superior. En estos escenarios, el volante sigue existiendo, pero no siempre será necesario para conducir de forma manual. La capacidad de transformarse aporta flexibilidad: permite que el volante “desaparezca” cuando no se requiere intervención humana y reaparezca cuando el piloto necesita retomar el control.

Más allá del diseño, el volante incorpora botones físicos, controles táctiles, sensores de presión y sistemas hápticos que permiten al conductor recibir retroalimentación incluso cuando el volante no está en uso. Esto mejora la interacción entre el conductor y el vehículo, incluso en modos parcialmente autónomos.

Con esta innovación, ZF busca adelantarse a las necesidades de la movilidad del mañana. Este volante transformable es más que un concepto: es un adelanto tangible de cómo se verá el interior de los autos autónomos. La transición hacia vehículos sin conductor no solo requiere cambios en software y hardware, sino también en la ergonomía, diseño y experiencia de usuario. Y ZF parece estar marcando el camino.