Max Verstappen gana el Gran Premio de Las Vegas 2025 y se mete de lleno en la pelea por el título

Max Verstappen consiguió una victoria crucial en el Gran Premio de Las Vegas 2025, una carrera marcada tanto por su dominio en pista como por la controversia que surgió después de la bandera a cuadros. El neerlandés arrancó desde la segunda posición, pero tomó el liderazgo desde la primera curva y mantuvo el control durante toda la competencia, consolidando uno de sus triunfos más importantes de la temporada.

La prueba comenzó con Lando Norris en la pole position tras marcar un tiempo de 1:47.934. Sin embargo, el británico cometió un error en la curva inicial que permitió a Verstappen adelantarlo de inmediato. A partir de ese momento, el piloto de Red Bull se distanció progresivamente del resto del pelotón, administrando neumáticos, ritmo y combustible sin mayores amenazas directas. Oscar Piastri y el propio Norris intentaron mantenerse cerca, pero nunca lograron inquietar al líder.

El desarrollo posterior al final de la carrera cambió por completo el panorama del fin de semana. Tras las revisiones técnicas obligatorias, tanto Norris como Piastri fueron descalificados por un desgaste excesivo en el patín del fondo plano de sus monoplazas, infracción que viola las normas de la FIA sobre altura mínima y desgaste permitido. La decisión alteró el orden final, reforzando el triunfo de Verstappen y modificando de manera significativa la distribución de puntos del campeonato.

Gracias a esta victoria y a las descalificaciones de los pilotos de McLaren, Verstappen logró recortar de manera importante su desventaja en la clasificación general. Con solo dos carreras restantes en el calendario, el resultado de Las Vegas reaviva la lucha por el título y coloca nuevamente al actual campeón en una posición competitiva para disputar las últimas rondas del año.

El Gran Premio de Las Vegas 2025 se convirtió así en uno de los episodios más determinantes de la temporada. La combinación de una actuación impecable de Verstappen, el error inicial de Norris y la sanción técnica a McLaren transformó un fin de semana aparentemente directo en un giro inesperado que mantiene abierta la batalla por el campeonato mundial.