18/04/2025

Enea Bastianini y su adaptación a KTM: un cambio de estilo tras su paso por Ducati

Enea Bastianini enfrenta uno de los mayores desafíos de su carrera en MotoGP al realizar la transición de Ducati a KTM, un cambio que exige una adaptación total a una moto con características completamente distintas a las que ha pilotado en los últimos años. Tras cuatro temporadas compitiendo con Ducati, el italiano ahora forma parte del equipo Red Bull Tech3, donde trabaja intensamente para modificar su estilo de conducción y maximizar el potencial de la KTM RC16.

Durante los recientes test oficiales en el circuito de Buriram, Tailandia, Bastianini compartió sus primeras sensaciones sobre la nueva moto y el proceso de ajuste que debe atravesar. El piloto reconoció que, después de tanto tiempo pilotando una Ducati, ha desarrollado una serie de hábitos de conducción que ahora debe resetear por completo para adaptarse a la mecánica y dinámica de la KTM. “Aún tengo dentro el estilo Ducati”, admitió el italiano, refiriéndose a la necesidad de reprogramar su pilotaje para aprovechar al máximo el rendimiento de su nueva máquina.

Las diferencias entre la Ducati y la KTM son notables en varios aspectos clave. La Ducati es conocida por su estabilidad y velocidad en línea recta, mientras que la KTM destaca por su agilidad en las curvas y su comportamiento más reactivo en la entrada y salida de las mismas. Estos contrastes obligan a Bastianini a modificar su enfoque en diversas áreas, desde la gestión del acelerador hasta la distribución del peso en la moto, pasando por la manera en que ataca los vértices de las curvas y cómo gestiona la frenada.

El proceso de adaptación no es instantáneo y requiere paciencia, tiempo y una comunicación fluida con los ingenieros del equipo. Desde su llegada a KTM, Bastianini ha estado trabajando estrechamente con los técnicos de Red Bull Tech3 para ajustar la moto a su estilo de conducción, probando diferentes configuraciones en áreas como la suspensión, la electrónica y la ergonomía. El objetivo es encontrar el equilibrio adecuado que le permita sentirse cómodo y competitivo lo antes posible.

A pesar de las dificultades iniciales, Bastianini mantiene una actitud positiva y está decidido a hacer de esta transición un paso exitoso en su carrera. Cada vuelta en pista es una oportunidad de aprendizaje, y el italiano confía en que, con el esfuerzo y la adaptación adecuados, podrá recuperar la velocidad y consistencia que mostró con Ducati. “Es un proceso de aprendizaje, pero estoy seguro de que podremos ser competitivos”, declaró el piloto, mostrando su determinación para consolidarse en esta nueva etapa.

Este cambio de moto es un claro ejemplo de la exigencia que enfrentan los pilotos en MotoGP. Incluso los más talentosos deben reinventarse y adaptarse constantemente a nuevas tecnologías y configuraciones, demostrando que el éxito en el campeonato no solo depende del talento natural, sino también de la capacidad de evolución y ajuste a las condiciones cambiantes.

Bastianini se encuentra en un momento crucial de su carrera, enfrentando el reto de transformar su estilo de conducción para encajar en la filosofía de KTM. Con dedicación y trabajo en equipo, su objetivo es aprovechar al máximo esta oportunidad y demostrar que puede ser competitivo independientemente de la máquina que pilote. Su evolución en los próximos meses será clave para definir su futuro en el campeonato y para determinar si logra consolidarse como una de las figuras destacadas de MotoGP en 2025.