El 72.8% de los autos nuevos en México se compraron mediante crédito hasta abril de 2025

El mercado automotriz mexicano continúa mostrando una clara tendencia hacia el financiamiento. Durante abril de 2025, el 72.8% de las ventas al menudeo de vehículos nuevos se realizaron mediante algún tipo de crédito, reflejando el papel cada vez más relevante de las instituciones financieras en la adquisición de automóviles. Esta cifra representa un ligero aumento respecto al mes anterior, confirmando la consolidación de esta modalidad como la principal vía para acceder a un auto nuevo en el país.

Si se incluyen las compras de flotillas —normalmente efectuadas de contado—, la participación promedio del crédito se ajusta al 61.7%, lo que igualmente mantiene al financiamiento como el principal motor de compra para el cliente individual.

En el análisis por entidad federativa, 22 estados del país reportaron una participación igual o superior al 70% en el uso del crédito para la adquisición de vehículos nuevos. Tamaulipas lidera la lista con un notable 83.3%, seguido de cerca por Baja California con 81.6% y Quintana Roo con 79.8%. En contraste, estados como Nayarit, Tlaxcala y Guerrero registraron cifras por debajo del promedio nacional, con participaciones entre el 59 y 62 por ciento.

Por tipo de vehículo, los subcompactos encabezan el ranking de unidades más financiadas, con un 66.1%, seguidos por los vehículos de usos múltiples (64.2%), las pick-ups (51.9%) y los autos de lujo (47.8%). En contraste, los segmentos de compactos y deportivos mostraron una disminución en su participación dentro del financiamiento.

Las financieras de marca siguen dominando el mercado como los principales proveedores de crédito automotriz, especialmente por los incentivos y condiciones preferenciales que ofrecen en plazos, enganches y tasas. La mayoría de los compradores optan por plazos de hasta 60 meses, mientras que los vehículos de lujo se adquieren mayoritariamente con financiamientos más cortos, de 36 meses.

Este comportamiento reafirma que el crédito automotriz sigue siendo un componente esencial para dinamizar el mercado interno. En un contexto donde el costo de los vehículos nuevos continúa al alza, el financiamiento se convierte no solo en una herramienta de acceso, sino también en un catalizador para sostener el crecimiento del sector y mantener la renovación del parque vehicular nacional.