Sergio “Checo” Pérez ha confirmado su esperado regreso a la Fórmula 1 y lo hará como piloto titular del nuevo equipo Cadillac, una escudería que debutará en la parrilla a partir de la temporada 2026. La noticia ha causado gran impacto en el mundo del automovilismo, pues se trata de uno de los movimientos más comentados de los últimos años, tanto por la trayectoria del mexicano como por la magnitud del proyecto estadounidense.
El piloto tapatío de 35 años acumula seis victorias en Grandes Premios y fue subcampeón mundial en 2023. Sin embargo, su paso por Red Bull terminó de forma abrupta en 2024, cuando el equipo decidió prescindir de él pese a que meses antes había renovado contrato. Después de una temporada fuera de la categoría, Checo regresa con energías renovadas y con la convicción de que este es su “último gran proyecto en Fórmula 1”.
Cadillac ha apostado por una alineación de experiencia, confirmando a Checo Pérez junto al finlandés Valtteri Bottas. Entre ambos suman más de 500 Grandes Premios disputados y una sólida trayectoria marcada por victorias, podios y liderazgo. El plan de la escudería contempla operar desde instalaciones en Indiana, Charlotte y Silverstone, además de utilizar inicialmente motores Ferrari hasta 2028, para después desarrollar su propia unidad de potencia en 2029.
El fichaje de Pérez y Bottas es considerado estratégico: se busca que la experiencia de ambos pilotos ayude a construir una estructura competitiva desde el inicio. Los directivos del equipo han señalado que la elección de Checo se debe a su madurez, capacidad de liderazgo y a la oportunidad de aportar valor a un proyecto que aspira a consolidarse como referente en la máxima categoría.
El regreso de Pérez ha sido bien recibido en el paddock. Incluso Max Verstappen, su excompañero, lo felicitó públicamente y aseguró que es una gran noticia para el deporte. Otros pilotos y analistas destacan que su año fuera pudo haberle servido como un descanso positivo y que su incorporación agrega valor a una Fórmula 1 que se beneficia de su presencia y experiencia.
Para Checo, este nuevo capítulo representa más que un reto deportivo. Su regreso no responde a una necesidad de demostrar nada, sino al deseo de seguir disfrutando de la competencia y de participar en un proyecto con propósito. Es una apuesta por dejar un legado en el automovilismo y por consolidar un equipo que puede marcar historia como la gran apuesta estadounidense dentro de la Fórmula 1.
El anuncio de su incorporación a Cadillac marca un giro en su carrera y una oportunidad irrepetible para cerrar su trayectoria en la élite con un proyecto ambicioso. El piloto mexicano afronta este desafío con serenidad y determinación, convencido de que este regreso puede convertirse en una de las etapas más significativas de su carrera.
More Stories
Russell asegura que Antonelli era quien estaba en riesgo dentro de Mercedes para 2026
Lewis Hamilton asegura que quiere volver a disfrutar de la Fórmula 1 con Ferrari
Fernando Alonso afirma que Álex Palou tiene nivel para adaptarse rápidamente a la Fórmula 1